09 | 06 | 2022

El pasado mes de abril se aprobó una nueva ley de residuos que, aunque todavía debe desarrollarse reglamentariamente para dotarla de contenido, fija las bases de un sistema económico más responsable con el medio ambiente.

Esta ley tiene como objetivo reducir residuos y lo hace responsabilizando a la persona que pone un bien en el mercado de la huella ecológica que deja éste. Ahora bien, las medidas que se adoptan también influyen en las relaciones de consumo, y es que, algunas nos afectan directamente como personas consumidoras:

1. Los productos en el mercado tendrán que ser eficientes y duraderos, es decir, deben poderse reparar y no tener una vida útil corta, no podremos estar tirando continuamente lo que no funciona y sustituirlo por otro ya que actualmente esto es lo que más residuos de difícil destrucción genera.

2. Los residuos alimentarios no se podrán desperdiciar, sino que se les tendrá que buscar una salida bien vendiéndolos, dándolos o reutilizándolos. Ya existen iniciativas que abordan esta problemática, pero ahora será una obligación para las empresas.

3. La reducción del uso de los envases se hará a partir de que las personas consumidoras puedan llevar los suyos de casa y si no se les podrá facilitar desde el establecimiento pero cobrándolos, siempre que informen del precio. También se establece la obligación de la gratuidad de consumir agua del grifo y la de información sobre la gestión de los residuos en los envases. Por último, a partir de 2023 quedarán prohibidos algunos productos de un solo uso como los bastoncillos de las orejas.

Con esta nueva normativa, junto con la de las nuevas garantías, podemos ver cómo se quiere encaminar las relaciones de consumo hacia las de un consumo responsable y no uno de usar y tirar como el que impera actualmente. Además, se quiere concienciar de que es necesario cuidar del medio ambiente y ser ecológicamente responsables desde nuestra vertiente personal, comunitaria y con el entorno.

Como bien se ha dicho, habrá que estar atentos a cómo se desarrollan y finalmente cómo se implementan estas medidas para ver si finalmente son efectivas y estamos paso a paso más cerca de una economía circular.